LOS POETAS Y LA POESÍA
Por: Ismael Illescas Ramírez
Un día se encontraron la palabra y la humanidad, ambas se necesitaban para transitar en las veredas de la existencia y decidieron crear el lenguaje. Al principio, fue complicado asignarle nombre a todo lo que rodeaba a la humanidad y ésta empezó a observar sus características para llegar a una idea común sobre algo.
Comunicarse por medio de gestos y onomatopeyas era una práctica que limitaba el entendimiento y fue como la humanidad decidió configurar las palabras hasta convertirse en lenguaje visual, fonético, gráfico; desarrollando códigos y símbolos que lograran conectar a los seres vivos. La palabra poco a poco se convirtió en el océano de la sabiduría y la humanidad en el navegante de la misma, explorando rutas que le permitan fluir su conocimiento.
La naturaleza nunca se imaginó que existieran seres capaces de crear algo más que definiciones y descripciones por medio de las palabras. Éstos fueron llamados Poetas y hacían del lenguaje cantos cargados de sensaciones capaces de hacer temblar los cuerpos de otras vidas. Esos seres extraños llamados Poetas, transfiguraban la realidad como el arcoíris en el cielo o como las auroras boreales que de la nada se expresaban.
Como llamarada de un volcán maldito, los Poetas fueron construyendo su espacio en la existencia siendo los primeros sabios de la era. Fueron llamados profetas, especie de semidioses que con su lenguaje sonoro explayan parábolas lingüísticas y metáforas a viento. Los Poetas crecieron, pero a la vez, su conexión es hacia un algo desconocido.
Algunos conectan con su interior, otros crean conexiones con el exterior y muchos otros aprenden a entretejer hilos invisibles de las causalidades de la dinámica de los vivos. Una poeta, un poeta no miran con literalidad la vida, siempre se encuentran sensibles a todo y su exploración es constante para mostrar esas emociones contenidas en voces certeras.
Para ellos, la poesía está en todo. Se usa en las frases coloquiales, en la publicidad, en esas expresiones de afecto, incluso en los detalles más minuciosos de lo que nos rodea o vivimos.
La poesía es el alma que canta, ave que trina en matices de tonos porque no puede ahogarlos en el silencio, a pesar de que el silencio también tiene su manera de cantar y solo ello lo saben los poetas. La poesía es semilla que una vez sembrada es capaz de crear y formar nuevas visiones y conciencias, ideales y valores con cargas de sentimiento, emoción, conocimiento y pensamiento; ingredientes de la sabiduría.