PEMEX RECONOCE QUE PIRATAS ROBARON 50 EQUIPOS DE RESPIRACIÓN EN PLATAFORMA AKAL-R

MÉXICO.- Petróleos Mexicanos (Pemex) confirmó que un grupo de personas armadas abordó la noche del 18 de agosto la plataforma Akal-R, ubicada en el Activo de Extracción Cantarell, en la Sonda de Campeche, y sustrajo alrededor de 50 equipos de respiración autónoma, esenciales para la seguridad del personal que opera en instalaciones marinas.
En una tarjeta informativa difundida este lunes, la empresa productiva del Estado detalló que el asalto ocurrió alrededor de las 22:00 horas, cuando personal ajeno ingresó de manera ilegal a la instalación. La administración del centro de trabajo dio aviso inmediato a las autoridades internas, lo que activó el Protocolo General de Atención a Eventos en Instalaciones Marinas y Costeras, en coordinación con la Secretaría de Marina (Semar).
A pesar del despliegue de seguridad, los responsables lograron huir sin ser localizados, llevándose el equipo especializado, cuyo valor económico y operativo no ha sido detallado. Estos dispositivos permiten a los trabajadores respirar en condiciones de emergencia, por lo que su pérdida representa un riesgo si no son repuestos de inmediato.
Pemex informó que no hubo trabajadores lesionados, aunque tres empleados presentaron crisis nerviosa, por lo que recibieron atención médica y fueron estabilizados en la propia plataforma.
La empresa presentó una denuncia formal ante la Fiscalía General de la República (FGR) y aseguró que se reforzaron las medidas de seguridad y vigilancia en la zona, una región que en los últimos años ha registrado un aumento preocupante en los asaltos a embarcaciones y plataformas petroleras, pese a la presencia de fuerzas federales.
El robo, aunque sin víctimas directas, vuelve a evidenciar la vulnerabilidad de las instalaciones estratégicas en altamar y la operación impune de grupos criminales que han extendido su actividad al mar.
N. de la R. La plataforma Akal-R forma parte del complejo Cantarell, uno de los yacimientos petroleros más importantes en la historia de México y que, aunque ha entrado en declive desde mediados de la década de 2000, aún mantiene actividad relevante para Pemex. La Sonda de Campeche ha sido objeto de creciente violencia: tan solo en 2023 se reportaron al menos 30 ataques a plataformas y embarcaciones en esta región, según cifras de la Cámara Mexicana de la Industria del Transporte Marítimo (Cameintram).
El robo de equipos de respiración autónoma no solo representa un perjuicio económico —cada uno puede superar los 50 mil pesos mexicanos, dependiendo del modelo— sino que compromete los protocolos de seguridad operativa en caso de fugas de gas, incendios o explosiones.
Además, la Secretaría de Marina ha reconocido en informes recientes que los grupos delictivos emplean embarcaciones pequeñas y rápidas, con capacidad para evadir radares y sistemas de vigilancia, lo que ha complicado las labores de patrullaje en mar abierto.
El fenómeno no es exclusivo de México: en otras zonas productoras del Golfo, como Nigeria, se han registrado tácticas similares, lo que ha motivado llamados internacionales a reforzar la seguridad marítima en instalaciones petroleras.